Desde TYRA queremos colaborar ante la situación actual aportando una serie de pautas psicológicas para poder cuidar de nosotros y de los que más nos importan.

Como opina el Colegio de Psicólogos de la Comunidad de Madrid, la evolución de la situación que se nos está comunicando a través de noticias y advertencias, no siempre se hace de forma idónea, bien por falta de rigurosidad, forma de comunicación, o su sobredimensión. 

Los expertos explican que esto puede influir en el estado emocional de las personas, dando lugar a conductas de alerta que se muestran poco eficaces.

Toma nota:

A – SI NO ESTÁS AFECTADO POR LA ENFERMEDAD 

Pero estás sintiendo una serie de emociones con alta intensidad y/o persistentes como:

  • Nerviosismo, agitación o tensión, con sensación de peligro inminente, y/o pánico.
  • No puedes dejar de pensar en otra cosa que no sea la enfermedad, o la preocupación por enfermar.
  • Necesitas estar permanentemente viendo y oyendo informaciones sobre este tema.
  • Tienes dificultad para concentrarte o interesarte por otros asuntos.
  • Te cuesta desarrollar tus labores cotidianas o realizar tu trabajo adecuadamente; el miedo te paraliza.
  • Estás en estado de alerta, analizando tus sensaciones corporales, e interpretándolas como síntomas de enfermedad, siendo los signos normales habituales.
  • Te cuesta controlar tu preocupación y preguntas persistentemente a tus familiares por su estado de salud, advirtiéndoles de los graves peligros que corren cada vez que salen del domicilio.
  • Percibes un aumento del ritmo cardíaco, respiración acelerada (hiperventilación), sudoración, temblores sin causa justificada.
  • Presentas problemas para tener un sueño reparador.

TE RECOMENDAMOS QUE…

  1. Identifiques pensamientos que puedan generarte malestar. Pensar constantemente en la enfermedad puede hacer que aparezcan o se acentúen síntomas que incrementen tu malestar emocional.
  2. Reconozcas tus emociones y los aceptes. Si es necesario, comparte tu situación con las personas más cercanas para encontrar la ayuda y el apoyo que necesitas.
  3. Cuestionate: busca pruebas de realidad y datos fiables. Conoce los hechos y los datos fiables que ofrecen los medios oficiales y científicos y evita información que no provenga de estas fuentes, evitando información e imágenes alarmistas.
  4. Informa a tus seres queridos de manera realista. Personas especialmente vulnerables como ancianos o niños: no les mientas y proporciónales explicaciones veraces y adaptadas a su nivel de comprensión.
  5. Evita la sobreinformación, estar permanentemente conectado no te hará estar mejor informado y podría aumentar tu sensación de riesgo y nerviosismo innecesariamente.
  6. Contrasta la información que compartas. Si usas redes sociales para informarte, procura hacerlo con fuentes oficiales. 

B – SI PERTENECES A LA POBLACIÓN DE RIESGO SEGÚN INDICAN LAS AUTORIDADES SANITARIAS 

  1. Sigue las recomendaciones y medidas de prevención que determinen las autoridades sanitarias. Confía en ellos porque saben lo que tienen que hacer. Ellos tienen los conocimientos y los medios.
  2. Infórmate de forma realista y sigue las pautas emocionales del apartado A.
  3. No le quites importancia al riesgo para intentar evadir la sensación de miedo o aprensión a la enfermedad.
  4. Tampoco magnifiques el riesgo real que tiene. Se precavido y prudente sin alarmarte.
  5. Si te recomiendan medidas de aislamiento, ten presente que es un escenario que puede llevarte a sentir estrés, ansiedad, soledad, aburrimiento y/o enfado, junto con sentimientos de miedo y desesperanza, cuyos efectos pueden durar o aparecer incluso posteriormente al confinamiento. Trata de conectar con tus seres queridos.
  6. Genera una rutina diaria y aprovecha para hacer aquellas cosas que te gustan pero que habitualmente por falta de tiempo no puedes realizar (leer libros, ver películas, etc.).

C – SI ESTÁS PADECIENDO LA ENFERMEDAD

Sigue las recomendaciones anteriores y además: 

  1. Mantén alejados tus pensamientos intrusivos. No te anticipes.
  2. No te alarmes innecesariamente. Se realista. La inmensa mayoría de las personas se están curando.
  3. Cuando sientas miedo, apóyate en la experiencia que tienes en situaciones similares. Piensa cuántas enfermedades has superado en tu vida con éxito.

Todo esto pasará y aprenderemos de ello. ¡Estamos con vosotros!

Autora: Belén Aglio, Psicóloga.

 Fuente: https://www.copmadrid.org/web/comunicacion/noticias/1456/comunicado-recomendaciones-dirigidas-la-poblacion-un-afrontamiento-eficaz-el-malestar-psicologico-generado-el-brote-coronaviruscovid-19